Cómo lavar una chaqueta de plumas

En el invierno una de las prendas que nunca pasa de moda son las chaquetas o abrigos que están rellenas de plumas, ya sean estas sintéticas o auténticas de algún animal, es uno de los chaquetones que debido a su impermeabilidad sirve también para que las gotas de lluvia no calen y la ropa no se moje. Además, aportar el calor suficiente para que el frío de fuera no se note en el cuerpo, ya que lo aísla. Este tipo de chaqueta se puede encontrar en varias longitudes, por encima de la cadera, por debajo del trasero y hasta los tobillos.

Sin embargo, lavarlo lleva una serie de pasos que se deben de seguir a raja tabla para que la tela no se dañe y poder eliminar correctamente las manchas que pueda tener, ya que en ocasiones al utilizar productos como toallitas se queda un cerco y la mancha desaparece, pero queda otro alrededor.

¿Cómo llevar a cabo el lavado?

  • Dale completamente la vuelta antes de introducirlo en la lavadora, cierra todas las cremalleras tanto la central como la de los bolsillos si las tiene, pero antes comprueba que no hay nada en su interior, si lo hay sácalo ya que con el lavado se puede adherir a la prenda o desteñirla o incluso rajarla si se engancha con algo puntiagudo.
  • Mete la chaqueta sola sin más ropa, a no ser que sea otra chaqueta también de plumas.
  • Si el plumas es largo, es preferible lavarlo solo, ya que en el interior de la lavadora coge peso y se hace más grande.
  • Se debe lavar con agua fría, con un máximo de unos 30 grados.
  • Selecciona un programa de agua delicada que incluya un aclarado largo y centrifugado suave.
  • Las revoluciones no deben de superar a 400.
  • Escoge un detergente específico que te garantice que cuida y protege las fibras del tejido y que evite que las plumas del interior se hagan una bola y se apelmacen unas con otras.
  • Evita lavar la chaqueta más de lo necesario, si puede ser una vez al mes.

 ¿Cómo llevar a cabo el  secado?

  • Puedes optar por secarlo dentro de una secadora, escogiendo una temperatura y una forma de rotación suave y lento
  • Puedes elegir que se seque de manera natural al aire libre.
  • Si la prenda la quieres secar en la secadora tiene que haber sido lavada a temperaturas bajas y durante un lavado lento.
  • Como truco para el secado, puedes incluir dos o tres pelotas de tenis para que las plumas mojadas de la chaqueta se separen mejor, ya que también colabora en la tarea de hacer que la prenda vuelva a su tamaño de origen.

  • Si escoges secarlo al aire libre, pongo a reposar sobre algo plano y en posición horizontal, sin que le dé directamente el sol, pues podría dañarse.
  • No lo pongas colgado de una percha, esto provoca que las plumas de su interior se apelmacen unas con otras, debido a todo el peso que tiene en el interior de la chaqueta.
  • Si lo secas sin secadora debes de vigilarlo y moverlo cada cierto tiempo, cada dos horas si es posible, asegurándote de que esté situado en una zona donde se pueda ventilar bien.
  • Nunca coloques el chaquetón encima de un radiador o cerca de algún conducto de ventilación que emane calor, pues puede quedar adherido a su superficie, perder el color o encogerse.
  • Si las plumas son originales de ave o de algún animal, el proceso de secado va a tardar más tiempo que si son de fabricación sintética.
  • Una vez secado por completo, se debe de ahuecar bien toda la chaqueta, para que las plumas de su interior queden bien separadas y distribuidas, para que de esa forma puedan llevar a cabo su correcta función de aislamiento del frío.

Trucos que debes conocer antes durante y después de lavar la chaqueta de plumas:

  1. Cuando el abrigo ya esté seco entero, ya puedes colgarlo de una percha o doblarlo por donde tiene sus costuras, pero debe ir colgado solo sin cosas encima, ya que al colocarle peso se deforma sus plumas no se distribuyen adecuadamente por lo que no se forman las cámaras de aire correspondientes, y por consiguiente no lleva a cabo su función principal que es la de aislar del frío.
  2. A pesar de que los abrigos con plumas naturales de animal cuestan más dinero, a la larga son más rentables pues resisten mejor los lavados y el paso del tiempo que aquellos que contienen plumas de origen sintético que suelen ser huecas, las cuales se pueden deteriorar más fácilmente, aunque su precio pueda ser menor.
  3. El consejo de meter alguna pelota de tenis en la secadora, es solo aconsejable en el caso de que el abrigo sea resistente, si no lo es, las pelotas podrían jugar una mala pasada a la tela y estropearla.
  4. Antes de introducir el abrigo, es conveniente probar si destiñe, para eso hay que mojarlo y estrujar una parte.
  5. Si el chaquetón tiene varias manchas que crees que serán difíciles de quitar solo con el lavado, puedes tratarlas previamente, para eso tienes que humedecerlo un poco y escoger un detergente adecuado para después echarlo justo sobre las manchas y frotarlas con algún cepillo o paño.
  6. Si vas a utilizar algún bote de quitamanchas asegúrate que la prenda tenga un color resistente, para ello pruébalo esparciéndolo sobre alguna zona poco visible, para que si sale mal no se aprecie el fallo. Si efectivamente la prenda destiñe no uses ese quitamanchas.
  7. Al secarlo al aire libre puede tardar entre tres y cuatro día completos en secarse entero, por eso es necesario revisar la caqueta palpándola por todas las zonas, para evitar que las plumas se juntes y formen pelotas en el interior del forro, ya que si esto se produce y no se separan a tiempo zarandeándolo, después será mucho más difícil lograr separarlas correctamente.

Si no dispones de lavadora.

Si tienes la lavadora estropeada, o tienes que ir a algún centro de lavado y no encuentras el momento para hacerlo, siempre puedes recurrir al lavado de antaño, que es hacerlo con tus propias manos. Pasos a seguir:

  • Utiliza un agua tibia, nunca caliente, pues la prenda se encogería y quedaría inservible.
  • Elige un detergente de calidad que cuide las fibras y las plumas del interior de la prenda.
  • El detergente ha de ser suave, si es posible que alguien te lo recomiende o que ya lo hayas probado antes con otras prendas.
  • Tienes que dejar durante unos sesenta minutos la chaqueta en remojo, toda cubierta de agua.
  • Ves estrujando con tus manos las diferentes zonas del plumas, de manera suave y con cuidarlo de no dañarla con tus uñas.
  • Antes de llevarla a secar sebes de quitarle el exceso de agua que pueda tener, para que así se seque lo antes posible.
  • Sigue el mismo método de secado que se ha indicado anteriormente. En una zona correctamente ventilada, donde no haga excesivamente calo, ni los rayos del sol la puedan alcanzar, siempre en posición horizontal, en un lugar liso y plano, nunca colgada de pinzas o perchas, ya que la pueden dejar marcas y hacer que se apelmacen las plumas en un solo lugar de la chaqueta, por lo que su función de aislante se perdería.
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